Te escribí una canción
No encuentro a Roy. Inútil decir que mirado por todas partes, por las más insospechadas, incluso fuera de la cocina (como si pudiera llegar muy lejos ese bichejo contrahecho). Bien es cierto que últimamente no le hice mucho caso, quizá se molestó, quizá permití que estuviera sobrio demasiado tiempo, pero es que últimamente los compromisos se han disparado (quién sabe cómo, yo sólo pasaba por aquí) y con ellos las llamadas telefónicas,las citas intempestivas, las fechas límite, las sonrisas falsas, las justificaciones rimbombantes, con ellos la vida se convierte en una contrarreloj, en un irritante juego para poner a prueba las más variadas aptitudes sicomotrices de uno y es en este punto en el que más necesito a Roy (por sucio y apestoso que sea), el único elemento excéntrico en este medio acuoso (en el que nado y me ahogo, nado y me ahogo) compuesto por demandas, exigencias, juicios sumarísimos, máscaras sociales, tirayaflojas, tejeymanejes continuos, continuados, continuístas. Ahora es cuando más necesito su tácita escucha, su imposibilidad de protesta, su permanencia obligada, su comprensión ilusoria e imposible, su inhumanidad. Ya no puedo ocultar más mi desesperación, espero siempre que la siguiente llamada sea la suya (aunque con ese muñón que tiene por mano dudo que sea capaz de marcar un número, el desgraciado), compré dos botellas de Habana Club Añejo que puse sobre la encimera por si el alcoholismo que tanto le ayudé a desarrollar le hace volver, pero están criando polvo y yo sudores fríos cada vez que las veo y paulatinamente la vida va perdiendo el sentido que nunca tuvo.
Roy, peluche absurdo, sé que no me entiendes porque nunca entendiste nada pero si oyes, lees, escuchas o hueles este mensaje quiero que sepas que te hecho de menos, que te necesito, y no sólo yo, también el alebrije y la pelota de basket y el difunto portátil (allá donde esté, en el limbo donde se pierden los procesadores sin bautizar) y el juego de pesas y la crema dermo-hidratante, y la mesilla de noche y el grifo del fregadero, ese grifo al que durante tanto tiempo abrazaste. Y por eso y también porque los he amenazado con una visita al vertedero todos te cantamos (a lo Moulin Rouge, con nuestros faldones de can-can) esta cancioncilla que acabo de inventar para ti:
How does it feel
To be on your own
With no direction home
Like a complete unknown
Like a ROYlling stone
Vuelve Roy, no seas cabrón.
11 Respuestas emocionales:
Mein Gott! Sin duda la letra de esa canción va a acelerar la decrepitud acelerada de Roy, produciendo a la par espasmos incontrolables ávidos de pelotas de todas las brasileras que conforman el equipo de volleyball (tan proclives a entrenar para mantener su performance), cosa que va a lograr el noble objetivo de que vuelva. La pregunta es si volverá como quien visita al Sr. Tyrell para completar esa partida de ajedrez que (según algunos bloggies), pone en duda tu linaje Kasparov.
En el preciso momento en que te olvides de él, aparecerá en el lugar más insospechado. Pasa con todas las cosas! Por qué no podría ser igual con Roy? Saluditos apretados
A Roy le gusta la marihuana, el ser mantenido, una felación, y los silencios... no le cantes, deja la puerta abierta de tu habitación y no llores más por él.
Mari: Roy nunca tuvo una tregua, siempre estuvo parado.
Max: ciertamente, tengo miedo, me lo imagino después de ganarme esa partida de ajedrez que tenemos empezada desde hace meses, aplastando mi cabecita con esos tres dedos que son mas bien garras... No lo merezco, la canción es bien bonita, y moderna.
Reality: Insospechado y roy eran términos opuestos, imposibles de mezclar... ¿y donde podrá aparecer? ¿ahogado en un bidón de una fábrica de cerveza? que miedo, que miedo
krisol: si, roy es como yo, o mi mr. Floppy. Por cierto, la puerta la tengo siempre abierta, acepto sustitut@s.
Mari: usted siempre se alía con crisol, ya veo que son de la misma calaña, que peligro, pobre roy con gente así suelta por la calle. Y la canción es HERMOSA, rebosé de INSPIRACIÓN, ni Bob Dylan, vamos, menudo paleto.
Jaja, yo también me uno a ese coro. Faltaría más. Pues no me va nada a mí un faldón de can-can a lo Moulin Rouge.
Besos buscadores.
pon una barbie a la vista...y ya veremos si sale o no.
Pues si, vaya coro cálido (por no citar a Mari y decir cachondo en chándal) que se anda montando por aquí, con Ella levantando su faldón enérgica (¿que anda buscando usted? ¿no está en google, necesita un buscador más avanzado?) y 25 ejerciendo de proxeneta de fetiches asexuados. A ver si logramos que ésto se parezca a un burdel de tintes parisinos y nos despojamos todos de nuestros chandals. Roy no podrá seguir resistiéndose.
ummm, ¿ha leído usted "Plegarías atendidas " de Capote?, ¿quiere usted que se la mande en un archivo? conteste primero a la segunda pregunta.
Le diré cuál es el personaje que me gustaría ser.
si, si. Digo no, si, no se. Si, no. Quiero decir si, siempre positivo, pero no. Mejor me lo mandas mientras trato de aclararme. Y me cuentas quién te gustaría ser, claro.
Te contaré que cuando he empezado a leerlo me he acordado de algo que leí aquí. Es divertidísimo y por supuesto que a mí me gustaría ser el puto P.B. Jones....
o cualquiera de sus "monstruos perfectos", pero en otra vida, cuando haya vivido esta mía, tan serena y sosegada.
Te lo mando al mail, creo que en mi hotmail figuro como luces.
pena que los otros creativos se te adelantaran con el perro de la loteria primitiva, otro crack animal donde los cuezan en vinagreta! espero volver a leer de roy, le estoy cogiendo un cariño que no merece palabreria fina...
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